Reflexiones...

¿Por qué siempre las mejores reflexiones de la vida 

surgen en los lugares y momentos más insospechados?

Aquí me hallo sentado, mirándome en el espejo del baño y sin parar de divagar. Este fin de semana tengo un par de EVENTAZOS bastante interesantes y estoy que me subo por las paredes...

Punto 1: ¡No se que ponerme! Llevo sin pisar una tienda 500 años, así sin exagerar. El motivo no lo se... Pereza, aburrimiento, saber que no me va a gustar nada. Ultimamente no estoy yo muy por la labor de renovar armario. Sigo teniendo camisas de hace 5 e incluso 6 años. Qué queréis que os diga, mientras me las pueda seguir poniendo no pienso desecharlas. El problema es que unas parecen sacos de patatas y otras ni me cierran debido a mi continuo devenir de kilos a lo largo de los últimos años.  La ropa que me gusta no me viene y la que me viene no me gusta...

De ahí que el ser humano sea un inconformista de cojones. Nos pasamos la vida deseando lo que no tenemos y cuando lo tenemos es como que "ni fu, ni fa". 

Punto 2: ¡El menú! Ser el anfitrión es algo que me encanta pero tela marinera los "cocotazos" que te das. ¿Esto les gustará? ¿Esto les parecerá bien? ¿Y si no les gusta? Y así todo el santo día... Además a todo ello debemos añadir la incógnita del pecado. ¿Serán de pecar o de no pecar? Claro que todo se solucionaría con un sencillo whatsapp pero vamos, aquí sigo yo dale don dale cruzando los dedos y esperando que sean de los de pecar. 

Conclusiones: Me pondré la camisa de siempre y prepararé para cenar algo rico, rico con lo que se queden sin "sentío" para que no se den cuenta de que repito la misma camisa de siempre... ;)

¡Besos queridos!

Mr. Horrible